Presidente de la SNHGE 1966

Don José Pedro Saldaña Treviño forma parte del grupo de innovadores de la historia nuevoleonesa del siglo pasado y del presente, fue el primer cronista de la ciudad de Monterrey y de los primeros miembros de la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística, A.C., creada el 17 de mayo de 1942; así mismo de la Asociación Estatal de Cronistas Municipales de Nuevo León “José P. Saldaña” fundada el 30 de mayo de 1987.

Nació en la pujante metropolitana ciudad de Monterrey el 19 de octubre de 1891, hijo del matrimonio de don José María Saldaña Peña y doña Tomasita Treviño, quien al igual que sus hermanos Amador, Evangelina, Josefina y Amelia fueron formados en los valores de las familias de la vieja estirpe; como la obediencia, disciplina, honradez y amor a la familia a la sociedad y a la patria.

Estudios y trabajo

En su afán de superación y con la orientación de buenos maestros, hizo los estudios de primaria y secundaria en la Escuela Oficial La Purísima y los estudios comerciales en la Academia General Zaragoza. Desde muy joven estudió periodismo y derecho laboral en la ciudad de México.

Su primer trabajo remunerado lo realizó como secretario del Lic. J. Eleuterio Martínez de la Garza, quien fungía como apoderado de los ferrocarriles nacionales de México, con una duración de cinco años. Ejecutó una obra meritoria en un clima especial de armonía, a veces de controversia sin privilegios, manteniendo su dignidad como principio de autoridad, presidió varios patronatos como lo hizo en dos ocasiones con el puesto de Presidente del Círculo Mercantil Mutualista de Monterrey.

El hoy que se nos va será el mañana, en el mismo Círculo Mercantil Mutualista de Monterrey desempeñó varias comisiones como el de Relaciones Mutualistas, siendo en muchas ocasiones consejero de la Directiva de la Compañía de Seguros Monterrey del Círculo Mercantil; todavía a sus 100 años de vida participó en la Comisión del Periódico Solidaridad.

El señor Saldaña fue servidor público por amor a sus semejantes y no por el afán de lucro, presidió el Patronato de Bomberos hasta sus últimos años; así mismo Presidente del Club Sembradores de Amistad; Vicepresidente del Patronato Pro-mejoras del Círculo Mercantil. Don Pepe como cariñosamente se le llamaba destacó en la vida laboral regiomontana, durante 31 años de 1935 a 1966. Fue Director General del Centro Patronal de Nuevo León. Con un dinamismo y optimismo incansable, laboró en el Mutualismo Nacional, fue Presidente de la H. Confederación Nacional de Sociedades Mutualistas de la República Mexicana, así mismo fue consejero en los Congresos Nacionales de Sociedades Mutualistas de la República Mexicana.

Labor de periodista

En el campo del periodismo realizó aportaciones de trascendencia, escribió artículos históricos desde 1911 hasta los últimos días; escribió en la revista Sueño, en los diarios La Semana, La Prensa, El Sol y El Mundo; su fama de escritor con estilo poético y elegante lo llevó a cubrir las páginas de las revistas: Mercurio de Nueva Orleans, Mundo Nuevo de Monterrey; así mismo La opinión de Tampico y sin faltar sus interesantes artículos de los periódicos locales El Norte y El Porvenir.

Cumplió su encomienda de escritor con profesionalismo en base a la razón, la amistad y de colaboración en toda actividad que contribuyera al bienestar de la sociedad. Durante los años de 1916 y 1917, fue director de la revista Solidaridad del Círculo Mercantil Mutualista de Monterrey; en ese tiempo desempeñó el cargo de Jefe de Circulación y Reportero del periódico El Diario, al poco tiempo fue clausurado por haber publicado en primera plana la imagen del Gral. Emiliano Zapata, montado en brioso Caballo, artículo escrito por don José P. Saldaña, hombre con un sentido rígido de la honradez; motivo de orgullo del biografiado, quien en su libro de Crónicas Históricas expresa “Manteniendo en pie la dignidad, que distingue al ser humano del irracional, he podido ocupar un lugar modesto en el conglomerado social, sin tener que sonrojarme por algo que mi conciencia haya hecho fuera del sendero rígido de la honradez”.[1]

Legado histórico

Un nuevo campo que cultivó fue la crónica, donde reflejó un universo pequeño, íntimo en el cual dio lo mejor de él incluyendo las vivencias de las que fue testigo presencial de un Monterrey, que en la distancia del tiempo nos parece increíble como un bello sueño, que gracias a la fina pluma de este gran escritor disfrutamos con entrañable amor como Estampas Antiguas de Monterrey, Grandeza de Monterrey, Vivencias del Recuerdo. Una crónica digna de la autoría de don José P. Saldaña es sin duda la que se publicó en 1988, titulada Y qué hicimos Monterrey en el Siglo XX, prologada por Monseñor Aureliano Tapia Méndez, quien expresa “Me parece su obra cumbre, resumen de todos sus escritos que historian con sabor autobiográfico, por decenios desde el alborear del Siglo XX, hasta la década de 1980”. [2]

Así mismo se mencionan como excelentes crónicas las obras como: El General don Porfirio Díaz en Monterrey, Apuntes sobre Monterrey, La Casa del General Bernardo Reyes, Mercado Colón. Entre otras.

Don José fue un acucioso investigador con rigor intelectual escribió textos de historia como: Episodios Contemporáneos y Episodios de Ayer, General Alonso de León, Historia y Tradiciones de Monterrey, Apuntes sobre Monterrey. Cultivó el género biográfico en una forma sencilla, armónica y transparente el mejor ejemplo lo tenemos en su obra En el Marco de la Historia, con 28 biografías de los integrantes SNHGE, así mismo La Novela de Juan Luis es otra de sus grandes obras. Colaboró en la revista Humanitas de la UANL, con escritos como Don Martín de Zavala, Memorias del General Jacinto B. Treviño, Retablo de la Calle Juárez, Visitas del Presidente de la República don Benito Juárez a Monterrey entre otros.

Su labor en diferentes sociedades

Los atributos de honestidad y amor cívico los puso de manifiesto en su labor altruista, que desarrolló en diferentes clubes y asociaciones. En 1966 presidió la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística, A.C., después de que el Profr. Timoteo L. Hernández Garza la presidiera durante 24 períodos consecutivos.

La colaboración que brindó don Pepe a la SNHGE, fue constante y efectiva, en 1971, siendo presidente de la misma el Profr. Israel Cavazos Garza, se le otorgó a don José el título honorífico de Presidente Vitalicio de la Sociedad. En 1972 al crearse la Medalla de Acero al Mérito Histórico << Capitán Alonso de León >> a iniciativa del distinguido socio Profr. Humberto Buentello Chapa en el marco de los festejos del XXX Aniversario se entregó la Medalla a tres historiadores a nivel internacional, siete a nivel nacional y nueve a nivel local, entre otros a don José P. Saldaña.

Perteneció a la Sociedad de Geografía y Estadística de la ciudad de México a la cual ingresó en febrero de 1944. El Ateneo de Ciencias y Artes de México, lo nombró socio corresponsal en julio de 1946, presidida por don Emilio Portes Gil. Fue académico de número fundador, de la Academia de Ciencias Históricas de Monterrey, el 25 de abril de 1947, presidida por don Carlos Pérez-Maldonado y secretario el Lic. Héctor González; perteneció a la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas, a la Sociedad de Cronistas de Nuevo León; fue socio honorario de la Sociedad Numismática de Monterrey y el Centro de Estudios Universitarios (CEU) le entregó el título de Honoris Causa en junio de 1980.

Don José Pedro Saldaña fue mimbro fundador del Instituto de Estudios Sociales y Urbanísticos de Monterrey, creado por el señor Antonio L. Rodríguez en 1948.

Su trayectoria política y militar

Con una preparación académica suficiente le permitió que a temprana edad destacara en la vida política de Nuevo León; a la edad de 18 años fue Presidente del Club Liberal número 1 en Monterrey. En las elecciones de diputados y senadores en julio de 1912, fungió como secretario del Partido Liberal, presidido por el Lic., y Gral. Lázaro Garza Ayala.

Fue miembro de los Partidos Liberal de Nuevo León y Constitucionalista Nuevoleonés; así mismo se desempeñó en el cargo de Diputado por el IV Distrito Electoral de Nuevo León a la XXVIII Legislatura Federal de 1918 a 1920 en el Congreso de la Unión. Estuvo al frente de la Secretaría General de Gobierno y ejerció interinamente el cargo de Gobernador de Nuevo León en 1935, durante el gobierno del profesor y general Gregorio Morales Sánchez.

Es importante destacar su vida como militar en la Revolución Constitucionalista con los generales Antonio Irineo Villarreal González y José Eráclito Santos Santos. Don Pepe fue testigo y partícipe de una época llena de transiciones, rebeliones, asesinatos, fusilamientos, persecución religiosa, revueltas militares, reformas básicas a la Constitución, caudillos asesinados, entre otros momentos de la vida política y agitada que vivió nuestro país.

El final

Al margen de ese mundo de confusiones políticas, don José creció y maduró en sus trabajos por la investigación histórica y por el periodismo. Durante el gobierno del general Bonifacio Salinas Leal, se integró a la comisión para la elaboración del Escudo de Armas de Nuevo León, junto con los señores Santiago Roel Melo, Carlos Pérez-Maldonado y Héctor González, todos miembros de la SNHGE en 1943.

Hombre sencillo de natural modestia no aspiró a grandes honores, sin embargo su tarea de servir a la comunidad se vio compensada al ser nombrado primer cronista de Monterrey en abril de 1967; en 1986 recibió la Medalla al Mérito Cívico Presea Estado de Nuevo León. Muchos reconocimientos recibió el ejemplar centenario, méritos que compartió con su amada esposa doña Bertha Hernández Cárdenas, quien murió en 1985.

En 1988 en honor a don José P. Saldaña, la Asociación Estatal de Cronistas Municipales de Nuevo León, creó la Presea que lleva su nombre, y que se entrega cada año al mérito de la crónica. Nuestro biografiado después de una vida fecunda y centenaria murió en la ciudad de Monterrey el 11 de octubre de 1992, a la edad de 102 años.